(Joan Gabarró es el autor de los marcapáginas que ilustran esta entrada)
A veces...
A veces tengo ganas
de ser un cursi
para decir: La amo a
usted con locura.
A veces tengo ganas
de ser tonto
para gritar: ¡La
quiero tanto!
A veces tengo ganas
de ser niño
para llorar
acurrucado en su seno.
A veces tengo ganas
de estar muerto
para sentir, bajo la
tierra húmeda, de mis jugos,
que me crece una
flor rompiéndome el pecho,
una flor, y decir:
Esta flor,
para usted.
(Nicolás Guillén)