El lobo y el cordero
Un Cordero perseguido por un Lobo, buscó refugio en el templo.
-Si te quedas ahí, el sacerdote te atrapará y te sacrificará -dijo el Lobo.
-Me da igual ser sacrificado por el sacerdote o devorado por ti -respondió el Cordero.
-Amigo mío -dijo el Lobo-, me apena ver cómo consideras una cuestión tan importante desde un punto de vista meramente egoísta. No me da igual a mí.
Ambrose Bierce